Las arañas lobo (también conocidas como lícosidos) son arácnidos generalmente de buen tamaño que caracterizan por su cuerpo grueso a la vez de estilizado, por el gran tamaño de sus dos ojos frontales y por lo vistosos que son sus quelíceros o “colmillos” recubiertos de pelos, similares a los de las tarántulas americanas.
Curiosamente estas arañas fueron las primeras en ser llamadas tarántulas, siendo llamas así las especies de terafósidos que habitan America y Australia debido a su parecido con las previamente encontradas en Europa.
De esta especie son características las guaridas que fabrican, creando galerías bajo el suelo recubiertas de pequeñas ramas que le otorgan cierta protección.
También de esta araña llaman la atención su gran tamaño, siendo una de las arañas más grandes que pueden encontrarse en Europa.
Texto e imágenes: Julio Jesús Añel y la ha visto en nuestro Parque Natural.
SABER MÁS…
La tarántula europea es la mayor araña del Viejo Continente. Cuando los europeos llegaron a América y vieron las enormes arañas que por allí campean, les dieron el nombre de «tarántulas» ya que eran éstas las mayores que conocían. Por eso ahora el nombre de «tarántula» se reserva a las grandes arañas americanas, y las tarántulas europeas se han tenido que conformar con el bonito nombre de «araña lobo».
La araña lobo es, como hemos dicho, bastante grande. Las hembras miden de 27 a 30 mm y los machos de 19 a 25 mm. El color del macho es blanquecino, mientras que la hembra es parda con marcas más oscuras y líneas en las patas.
Hábitat
La hembra de la araña lobo vive toda su vida en su gruta, desde la que caza agazapada en la entrada. Sin embargo, los machos, aunque se protegen en cuevas, recorren el territorio en busca de hembras y caza. Ambos utilizan las cuevas para hibernar.
La cueva es en realidad una galería vertical que puede llegar a una profundidad de 30 cm, situada en terrenos pedregosos y soleados. Su entrada suele estar forrada de hierbas y palitos unidos con seda, formando un pequeño embudo. Su utilidad es la de evitar los ataques del escorpión amarillo (Buthus occitanus), que es su más importante depredador.
Es posible también que la altura del «embudo» sirva a los machos para evaluar la idoneidad de una hembra que, bien protegida de los depredadores, será más capaz de llevar a buen término su puesta. Además le indicaría las probabilidades de ser devorado por la hembra, puesto que cuanto más alta sea la protección, mejor alimentada está la araña que la construye y menos posibilidades de que esté hambrienta.
Alimentación y costumbres
Son de costumbres nocturnas, aunque la hembra puede ser vista a la entrada de su cueva durante todo el día durante el buen tiempo. Se aparean en primavera, y el resultado es un centenar de huevos que la hembra envuelve en seda.
Los machos pueden llegar a vivir hasta dos años, muriendo poco después de alcanzar la madurez sexual. Las hembras, sin embargo, alcanzan los cuatro años de vida o más.
Las arañas lobo tienen muy buena vista y tienden a huir ante un animal grande, por lo que es difícil que piquen a un humano. Aunque son venenosas, su veneno está diseñado para atacar a insectos y su picadura no suele ser más dolorosa que la de una abeja.