Es triste ver cómo, en plena era de la información, la ortografía sigue siendo una asignatura pendiente para muchos. Nos encontramos ante un ejemplo alarmante de este problema en un cartel que muestra las palabras «COLÓCA» y «ACA». Esta combinación no solo desafía las normas básicas del idioma, sino que también refleja una falta de cuidado que debería preocuparnos a todos, especialmente cuando proviene de profesionales que se dedican al diseño gráfico.
Comencemos con «COLÓCA», una palabra que, tal como está escrita, presenta un error evidente. En español, los verbos en imperativo, como es el caso de «coloca», no llevan tilde en la segunda persona del singular. El uso incorrecto del acento en «COLÓCA» no solo es un error ortográfico, sino que también genera confusión en la lectura. Esto podría llevar a los lectores menos familiarizados con el idioma a pensar que se trata de una palabra distinta o que requiere una entonación especial, cuando en realidad es simplemente un verbo que ha sido mal escrito.
El siguiente error es «ACA», una palabra que, si bien se utiliza en algunos países de habla hispana para referirse a lo que en España conocemos como «aquí», se presenta en el cartel sin la tilde que le corresponde. En español, «acá» lleva tilde para diferenciarla de «aca», que no tiene un significado en nuestro idioma. Este tipo de errores, aunque puedan parecer menores, contribuyen a la degradación del lenguaje escrito y afectan la percepción de quienes observan el cartel.
Lo más preocupante de todo esto es que este tipo de errores no se producen en un contexto informal, como un mensaje de texto o una nota rápida. Estamos hablando de un cartel grande, visible, que ha sido diseñado y colocado para que muchas personas lo vean. En este caso, la responsabilidad recae en aquellos que tienen negocios de gráficas y diseño, quienes deberían ser los primeros en cuidar la presentación y la corrección del idioma. La ortografía no es solo una cuestión de reglas, sino de respeto hacia el lector y hacia el propio idioma.
La calidad de un diseño no se mide solo por su apariencia visual, sino también por la precisión con la que comunica el mensaje.
Por tanto, es fundamental que quienes se dedican a la creación de material gráfico tomen conciencia de la importancia de la ortografía y se esfuercen por evitar estos errores.
C.G.N. –Todo Torrevieja–
